El 70% de las grandes empresas Españolas cuenta con un sistema ERP pero solo un 13% de ellas lo explota completamente.

 

Los implantación de un sistemas ERP (Enterprise Resource Planning, Planificación de recursos empresariales) puede llegar a representar el 2% o el 3% de la facturación anual de una empresa grande. Sin embargo, más de la mitad de las empresas considera que su sistema ERP está insuficientemente explotado. Además, su implantación presenta casi siempre retos notables, por lo que conviene contar con un apoyo a las decisiones.

Se calcula que entre un 45 y 50 por ciento de empresas medias que no disponen de un ERP. Esto no quiere decir que no tengan Informática, sino que la tienen desarrollada a medida; creada en sistemas antiguos, cerrados.

Por eso, los grandes proveedores están seguros de que en el sector PYME existe un mercado para vender pero es difícil llegar. Tras el 2000 y el euro debería surgir el mercado de reposición.

 

En los últimos 15 años, la implantación de un sistema ERP ha sido uno de los fenómenos más destacados en materia de Sistemas de Información en todo el mundo. Concebidos como sistemas capaces de integrar informaciones de diferentes puntos de la organización, presentan beneficios en todas las áreas de la compañia, desde la toma de decisiones hasta el aumento de la productividad. Sin embargo, su implantación plantea también enormes dificultades, por lo que el apoyo de la dirección es fundamental.



Ventajas de los ERP

  • Los sistemas ERP ofrecen un enorme potencial de ahorro tangible e intangible. Entre los primeros destaca la reducción de recursos humanos necesarios y de inventario (en torno al 35%). Por otra parte, los ERP aportan un incremento la cantidad y la calidad de información de los consumidores (65%), lo que representa un beneficio intangible muy valorado.
  • Estos sistemas permiten ver y gestionar la red extendida de la empresa, sus proveedores, alianzas, y clientes como un todo integral. Entre otros beneficios, esto repercute en una mejora de la cadena de procesos, una mayor estandarización y mayor eficacia en la respuesta a los clientes.


    Costes de la implantación



    Los sistemas ERP son caros, complejos y notoriamente difíciles de implantar. Para instalar y parametrizar correctamente el sistema, se suele requerir de la ayuda de integradores expertos.

    Así el coste total de implantación, que incluye software, hardware, consultoría y personal interno, puede llegar a epresentar el 2% o el 3% de la facturación anual de una gran empresa. Sin embargo, más de la mitad de las empresas Españolas que cuentan con un sistema ERP considera que está insuficientemente explotado.

    La investigación de mercado confirma la gran adopción de los paquetes ERP por parte de las empresas Españolas con altos índices de facturación. SAP es el líder con el 62 por ciento del total de paquetes en el mercado, le siguen de lejos proveedores ERP como J.D. Edwards, Movex, Baan, Ross Systems y Oracle, por este orden.

    La mayor parte de estos proveedores destacan el acceso a la pyme y incorporación de nuevas aplicaciones (CRM, Business Intelligence, etc.) en sus sistemas ERP como parte de su estrategia.

    Tendencias de futuro

  • Si bien hasta finales de los años noventa la implantación de sistemas ERP se había llevado a cabo en su mayoría en empresas de gran tamaño, desde principios del esta década está extendiéndose cada vez más a empresas de tamaño mediano y pequeño, mediante el lanzamiento de sistemas más económicos y con tiempos de implantación más cortos.
  • Internet significa un reto adicional para todos los actores implicados en los proyectos ERP. Las iniciativas de e-business están llevando a una reconcepción de la Visión del negocio de las empresas, poniendo al consumidor o al servicio en el centro. Se trata de una filosofÍa contraria a la idea original de los sistemas ERP, orientados al alineamiento de los flujos de información y de materiales dentro de la empresa. Por ello, en los últimos años, los ERP han incorporado módulos más centrados en el front-end, y otros que extienden sus funcionalidades tradicionales. Pero existe la duda de si estas innovaciones se adaptan realmente a las nuevas realidades de los mercados. En particular, queda por ver especialmente si podrá dar servicio individualizado a empresas más pequeñas, o si serán los denominados ASP (Application Service Providers) los que dominarán este segmento de mercado.
  • La evidencia empírica sugiere que el principal reto los sistemas ERP sigue estando en su correcta implantación. No es meramente una cuestión de alta complejidad técnica, sino que suele conllevar un cambio de filosofía empresarial, por lo que muchas veces tiene que ser concebido dentro de un programa de gestión del cambio. De ahí que, cada vez más, la implantación de un ERP deja de ser una cuestión de sistemas de información, y se convierte en un aspecto de la estrategia de negocio .


    Fuente: Especial Sistemas ERP en la Empresa Española. Conclusiones del estudio Aplicaciones Corporativas. situación en España. Tendencias futuras. Realizado en colaboración con Grupo Penteo. 2003.